6 de mayo de 2010

Legislar la magia

Los antiguos romanos representaban al dios Jano con dos caras. No está muy claro por qué, aunque hay algunas pistas: como dios de las puertas (sí, en serio) su función sería algo así como vigilar el interior y el exterior de los recintos, y quizá por eso se le consagraron las Portae Belli del foro de Roma, que solo permanecían abiertas en tiempos de guerra (vamos, casi siempre) y en cuyo interior se celebraban diversos rituales propiciatorios. Según la Wikipedia en su edición en inglés, Macrobio y Cicerón decían que se trataba en realidad de dos dioses, Janus y Jana, masculino y femenino, aunque las representaciones clásicas dejan cierto margen a la duda: o su versión no era correcta o Jana debía ser la patrona de las mujeres barbudas del circo:



Y otra leyenda, en fin, dice que su aspecto se debe a que Jano tenía el poder de mirar al pasado y al futuro.

Quizá sea por eso que la revista Jano no se limita a noticias médicas de actualidad, y de vez en cuando nos obsequia con informaciones (es un decir) acerca de las pseudoterapias más rancias. La última, de momento, es la que Carla Nieto dedica al seminario sobre homeopatía antroposófica celebrado hace unos días por ECHAMP, y del que ya comentamos algo por aquí.



En realidad el artículo no aporta grandes novedades. Alguna que otra mentira gorda...

Castilla señaló que debido al vacío legal existente, hace casi dos décadas que no se ha producido ningún nuevo lanzamiento de este tipo de fármacos

Y una frase como para enmarcarla

no se puede aplicar el mismo baremo a una sustancia química que a una dilución

Pero, por lo demás, el artículo da vueltas en torno a un supuesto "vacío legal", quejas que como ya hemos visto en otras ocasiones se traducen más bien en un "queremos un trato aún más favorable". Pero la redactora del artículo no lo sabe (y eso que pistas no le faltan), y desde el titular



Hasta las entradillas



Pica y repica en lo del vacío.

No es ninguna novedad. Sin ir más lejos, hace un par de meses La Vanguardia publicaba un lamento parecido



Y si seguimos hacia atrás en el tiempo encontraremos cientos, miles de afirmaciones similares.

Y si bien los lamentos de los homeópatas son injustificados, lo cierto es que en general se considera que existe una falta de regulación de las llamadas "terapias alternativas". La mayoría (si no todos) de los partidos políticos prometen periódicamente emprender la tarea de dotarlas de un marco legal, y hasta hay alguna que otra propuesta normativa. Por no hablar, claro, del Decreto de regulación de las "terapias naturales" de la Generalitat de Cataluña, que como era de esperar fue declarado nulo por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad.

Ahora bien, ¿de verdad hace falta formular esa regulación? ¿Es tan necesaria?

En teoría aquí debería venir una larga disertación jurídica, pero se la ahorro. En lugar de eso vamos con un caso práctico. En esta ocasión nos lo ofrece Carcasor en esta entrada de su blog. Léanla, por favor, que merece la pena. Yo les espero.


¿Ya la han leído? Bien. Quizá después de conocer lo que promete el "doctor" Richard Millo piensen ustedes que, después de todo, sí que hace falta una regulación que ponga coto a estos abusos.

En cuyo caso estarán enormemente equivocados.

Repasemos el caso. El tipo este afirma, como cita Carcasor, que

la quiropráctica puede ayudarle si usted padece:

  • Falta de energía o fatiga.
  • Pinzamientos.
  • Dolores de cabeza y migrañas.
  • Disminución de la movilidad del cuello.
  • Traumatismo cervical.
  • Vértigos o mareos.
  • Tensión o dolor de hombros.
  • Adormecimiento u hormigueo en brazos, manos o dedos.
  • Dolor dorsal o lumbar.
  • Dolor de pecho o Asma.
  • Mala postura
  • Dolor abdominal o acidez
  • Ciática o dolor en la pierna
  • Problemas de rodillas o dolor articular.
  • Adormecimiento u hormigueo en muslos, piernas o pies.
  • Estrés.

Lo cual, sigue explicando Carcasor, no solo es falso, sino en muchos casos francamente peligroso. De hecho, probablemente sea peligroso en muchos más casos de los que cita, y eso por no ponernos a hablar de otros riesgos más difusos, pero reales, como la "necesidad" de controlar periódicamente la espina dorsal de los pacientes mediante radiografías.

Lo malo es que eso no se puede remediar regulando la profesión quiropráctica. La doctrina quiropráctica postula que lo puede curar realmente todo mediante la manipulación espinal, así que un reconocimiento de la profesión debería, en principio, aceptar semejantes barbaridades. Es el problema que tiene el pretender reducir lo que Ben Goldacre llama con acierto "la medicina basada en la fe": ¿cómo se puede dar validez a las creencias mágicas? ¿De verdad se puede dar reconocimiento oficial a una creencia sin fundamento real?

Y si, por otro lado, se pretendiera limitar el uso de la quiropráctica al tratamiento de las dolencias para las que sí ha demostrado alguna efectividad, la conclusión sería la misma: en realidad la quiropráctica solo parece tener cierta eficacia (limitada) en el tratamiento de dolores lumbares, probablemente porque sus "ajustes" hagan las veces de un masaje. Pero para eso bien podemos acudir a un fisioterapeuta, cuya preparación se ajusta más a criterios científicos y que no nos van a venir con cuentos sobre la "inteligencia innata" o las "subluxaciones".

Y queda un tercer problema, claro: si se regulan la homeopatía, la quiropráctica, la reflexología o el reiki, ¿por qué no la sanación por imposición de manos o las velas hopi? Si nos atenemos a la evidencia científica, ¿qué diferencia la reflexología podal del diagnóstico y tratamiento del mal de ojo?

Hace unos meses, un grupo de profesionales sanitarios dio a conocer su Propuesta Omega. La entrada final de su blog decía que

Según hemos podido comprobar en las anteriores entradas, tanto los Códigos Deontológicos de las diferentes disciplinas sanitarias como la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias, regulan suficientemente la obligación de que las terapias que se utilicen estén basadas en la evidencia científica. Por ello, las noticias, como la señalada en otro post, en las que profesionales sanitarios anuncian como científicas terapias que no lo son, deberían ser controladas por los correspondientes colegios oficiales y por la administración sanitaria... salvo que los Códigos Deontológicos y las Leyes Sanitarias sólo se publiquen para rellenar hojas en las publicaciones respectivas y no sean de obligado cumplimiento.

 En realidad, la regulación de las terapias alternativas debería ir por ese camino, mejorando la protección de sus usuarios, como tantas veces hemos pedido desde Círculo Escéptico, y especialmente potenciando la información rigurosa sobre estas prácticas. No para impedir, como dicen algunos, la libertad de elección, sino precisamente para que esa libertad sea real, y quienes las elijan sean conscientes de lo que verdaderamente pueden o no ofrecerles. Pero, aparte de eso, ¿de verdad creen ustedes que deben legalizarse estas prácticas? ¿Se imaginan que Richard Millo y tantos otros de su cuerda pudieran colgar legalmente un título de "doctor" en su consulta?



Nota bene: Y antes de que nadie me lo pregunte en los comentarios: cuando digo eso de que


¿De verdad se puede dar reconocimiento oficial a una creencia sin fundamento real?

no me olvido de la existencia de las Facultades de Teología o del Registro de Entidades Religiosas. Aunque para esto último quizá sirva eso de la reducción al absurdo...

4 comentarios:

  1. Que sí, que hay que regular. No debería haber vacíos legales en temas de salud. Propongo lo siguiente:
    "Quedarán terminantemente prohibidas todas aquellas actividades de diagnóstico o tratamiento que no estén respladadas por evidencias científicas, para evitar daños a la salud, bien por acción, bien por omisión".
    ¿Les gustará así a los del ECHAMP?

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  2. Aunque no tiene una relación directa con el caso, recomiendo echar un vistazo a http://www.elmundo.es/elmundo/2010/05/05/barcelona/1273059066.html. Quién sabe si algunas resoluciones judiciales contra la imposición de manos no acaben yendo así.

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  3. La paradoja legal de hoy, Coté el dalso médico de Ferrol y Vinaroz, denuncia a sus victimas por difamación.
    Esto és increible, para mas datos ver:

    http://www.lavozdegalicia.es/galicia/2010/05/06/0003_8465606.htm

    A donde hemos llegado

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  4. Después de tanto tiempo, y tras una semana de ataques de quiroprácticos hacia mi persona en la sección de comentarios de mi blog, me acabo de dar cuenta que me citaste aquí :D

    Muchas gracias por la cita, me has alegrado el día,

    un abrazo.

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